Las picaduras de arañas
Son lesiones que afectan inicialmente al tejido blando pero la evolución y respuesta orgánica de cada individuo es diferente; en ocasiones distintos sistemas pueden comprometerse y causar la muerte si la atención médica no es inmediata y adecuada; las más vulnerables son aquellas personas alérgicas a las picaduras de araña.
Una picadura es sencillamente una herida punzante producida por los insectos (en su mayoría), artrópodos y animales marinos; en ella se inyecta sustancias tóxicas que actúan localmente y en forma sistemática en todo el organismo de acuerdo al tipo de agente causante, la respuesta del cuerpo y la cantidad del veneno.
Las arañas ponzoñosas más comunes son:
Tarántula, pollera y la viuda negra, cuando sufrimos alguna picadura de estas arañas lo más común es que la víctima no sienta la picadura al principio y sólo se podrán observar dos puntos rojos en el lugar en donde ha sido mordida. En algunos minutos, se podrá sentir dolor intenso, calambres en el miembro afectado el cual puede extenderse hacia los músculos de la espalda; la rigidez abdominal es también bastante común y se produce por el dolor; en ocasiones, dependiendo de cada individuo, puede haber dificultad para respirar, nauseas y vómitos como sudación abundante.